Los vecinos de la zona
nudista son objeto de chanza por parte de los viajeros cuando el trenecillo
atraviesa sus urbanizaciones
Son numerosos los
vecinos nudistas que se han visto jaleados y humillados por los turistas que
viajan en el trenecillo. Cuando, de hecho, entra en la zona algunos de ellos
practican la “caza del nudista” para mofarse y levantar la carcajada entre el
resto de los viajeros. Un tren que comienza su recorrido de ida y vuelta a las
18:15 y termina a la 1 de la madrugada, con lo que son 12 las veces que
diariamente cruza por las principales urbanizaciones naturistas ya que una de
sus paradas es el Hotel Naturista Vera Playa Club.
Veraplayazul ha
reclamado al Ayuntamiento una solución urgente que, como en el resto de las
múltiples cuestiones pendientes, no llega. Bastaría con que el trenecillo
cambiara su recorrido en sus últimos dos kilómetros y, en vez de alterar la
especial idiosincrasia de la zona naturista y la libre práctica del naturismo,
tomara la carretera de Villaricos hasta llegar a la desviación del hotel
citado. Una solución que no conlleva ningún coste adicional, pero que el
Ayuntamiento es incapaz de articular.
Veraplayazul recuerda
que el nudismo es uno de los emblemas del turismo de Vera, referencia única en
España en otros tiempos, pues el abandono municipal de la zona es notorio, con
mayor énfasis aún que el que sufre el resto del litoral veratense. Así, tal y
como ha denunciado Veraplayazul, que representa a los vecinos de toda la costa
de Vera, en los últimos meses los naturistas han padecido problemas
respiratorios e irritaciones como consecuencia de, oficialmente, las microalgas
y han visto como su playa recibía grava en vez de arena. Antes, una ordenanza
llegó, incluso, a amenazar la práctica del nudismo y también tuvieron que
soportar la apertura de un parking “con vistas” al centro de su playa.
Por el contrario, sus
grandes problemas pendientes, como son las inundaciones y la regeneración de la
playa siguen sin ser afrontadas. A ello habría que unir, por supuesto, los
problemas que comparten con toda la costa de vera: la falta de calidad del agua
por los vertidos de la depuradora de Villaricos y de otras fuentes que aún no
se conocen públicamente porque la Junta no muestra los últimos análisis de las
microalgas; la deficiente limpieza de la playa y las nulas inversiones. Eso sí,
el tren turístico sí se acuerda de donde se encuentra la zona naturista para,
como mínimo, alterar su forma de vida cuando no faltarles al respeto si prende
la burla entre los viajeros.
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